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| Fernando, Ramón, Gerardo, Antonio y René junto al presidente de Cuba, Raúl Castro. Foto: Estudios Revolución. |
Los cubanos han asistido a un hecho tan
trascendental en la historia de la nación cubana, parecido al del año 2000
cuando fue devuelto a esta Isla, el niño Elián González.
Tras 16 años la voz enérgica del presidente de
Cuba, Raúl Castro, marcó en el aire un cambio. En esta ocasión, una nueva
apertura de la relación bilateral entre Estados Unidos y Cuba, que tuvo en un
inicio el regreso de los tres héroes cubanos: Gerardo Hernández Nordelo, Ramón Labañino Salazar y Antonio Guerrero, tres de Los Cinco, que aún permanecían presos en cárceles de Estados Unidos.
Sentimientos de nacionalidad afloraron en la piel
de todos quienes escucharon atentamente las noticias, vieron el rostro alegre
de Gerardo quien le regaló en un beso la intensidad de más de cuatro mil 608
horas de separación de su adorada Adriana, o de Ramón cuando en un estremecido
abrazo cubrió a su esposa e hijas, o de Tony, ese hombre que tuvo siempre la fe
en su hermana Maruchi al afirmarle que volvería, o de su madre Mirtha una mujer
heredera del coraje de Mariana Grajales.
Diversos mensajes acompañaron la fecha con la
frase ¡#Volvieron!, y que emergieron desde la sensibilidad de la opinión
pública mundial, en especial de cubanos residentes en varias ciudades del orbe
que dejaron en sus twits un mensaje de optimismo a estos Héroes, que no cejaron
en su empeño de mantener para la nueva generación una patria libre e
independiente como bien quería José Martí.
El 17 de diciembre es ya una fecha con un nuevo
albor, que en los más nuevos habitantes de esta isla caribeña encontró la
retribución del cariño especial por quienes partieron un día con la idea de
mantener el carácter irrevocable de una Revolución, y de los ideales de hombres
tan grandes como Carlos Manuel de Céspedes, Antonio Maceo, José Martí, Ernesto Che Guevara, el líder cubano Fidel Castro Ruz y que ahora incluye nuevos hombres.
Las pañoletas azules y rojas, los estudiantes
universitarios, la intelectualidad, los obreros, y el pueblo en general entregó
un pedazo de su corazón a estos cubanos, que como bien dijo Fernando González,
uno de Los Cinco, sin ellos la vida no tenía sentido.
Hoy la vida de muchos cubanos está completamente
llena de alegrías, con la fe de dialogar en cualquier calle de Cuba con Ramón,
o de disfrutar al ver el paseo de Gerardo junto a su amada, o de asistir a la
apertura de un inmenso mural que pinte Tony con sus coloridas Mariposas.
En Cuba un nuevo amanecer se vislumbra, un
amanecer para sus Héroes, una jornada de apuesta por la defensa de la soberanía
de la Patria, llena de estos gigantes que enarbolarán por siempre las banderas
de la paz.
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