Cuba
reúne una amplia vida cultural, que tiene entre sus principales
manifestaciones a la escultura, arte que cuenta con prestigiosos
maestros, quienes impregnan a las obras la dedicación absoluta de la
creación y la imaginación poética personal.
Mas es en la
provincia de Las Tunas, territorio ubicado a unos 690 kilómetros de La
Habana, donde este arte se le adjudica una mayor connotación.
Desde el
nacimiento de la provincia en 1976 tras la división
politico-administrativa de la Isla, existían vestigios de un movimiento
escultórico integrado por aficionados y profesionales, principalmente.
A partir de 1977 surgió la iniciativa, por parte de los creadores de la
nación, de donar colecciones y emplazar obras de disímiles formatos,
con el fin de mantener vivo este movimiento que desde 1968 realizaba
encuentros interculturales.
La destacada artista de la plástica Rita Longa constituyó una de las
principales figuras de reconocimiento nacional que intervino en el
surgimiento de esta arraigada tradición que pervive en las calles,
plazas, instituciones de económicas, educacionales y de salud, de Las
Tunas.
Altos valores artísticos en las obras de varios autores cubanos se
diseminan por toda la ciudad con el fin de ofrecerle al transeúnte la
visión de las corrientes más actuales de esa manifestación.
Suman más de 100 las piezas monumentales distribuidas por los
municipios tuneros, que mantienen el esplendor de las Bienales de
Escultura, eventos en los que artistas y visitantes intercambian
conocimientos y conceptos parar fomentar el fondo de la prestigiosa
colección tunera.
Piezas como Elementos aborígenes, de Herminio Escalona, La Fuente de
las Antillas, de Rita Longa, y Lucha Armada, de Manuel Chiong, engalanan
el paisaje citadino que permanece para las diferentes generaciones, que
conservan a Las Tunas como Capital de la Escultura Contemporánea
Cubana.
Paso a paso los escultores han moldeado lo que resulta cotidiano en el
andar del pueblo tunero concebida como única muestra de lo mejor del
arte de las tres dimensiones, en las que los conceptos estéticos
enriquecen su belleza artística.
El
arraigo y orgullo de los habitantes a las fieles obras, memorias
retrospectivas de las variantes escultóricas del país, resaltarán por
siempre en las Tunas, donde la huella del movimiento escultórico
perdurará con vitalidad por los senderos de los siglos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario